Cuento de Navidad

La pasión del humanista y la agudeza del letrado permiten al juez Baltasar Garzón colocar en el crucigrama del mundo contemporáneo los términos indispensables para conjurar sus amenazas. Los textos aquí reunidos son la prolongación, mediante la palabra, de una cruzada contra la impunidad que ha provocado ardientes respaldos y adhesiones. Hacer valer el imperio de la justicia, derribar sus fronteras, desterrar la impunidad y proteger a la humanidad de crímenes como la agresión, el terrorismo, la violación de los derechos de los pueblos indígenas, el fundamentalismo y la desmemoria, entre otros, definen la vida y la obra del autor de este inapreciable libro.

Epílogo

Efectivamente es posible un mundo diferente, un mundo en el que la fuerza del derecho sea la única que se imponga desde la legalidad como firme y eficaz instrumento de paz y, en definitiva, se trata de que los ciudadanos nos creamos todo aquello que hacemos y por lo que luchamos.

Es posible también una Navidad realmente blanca, con un final distinto al cuento inicial y especialmente compartida en una comunidad internacional que abandono su tradicional inactividad e inoperancia se ponga manos a la obra para que la razón se imponga sobre la barbarie

Es posible, en definitiva, que los polos opuestos, Foro Económico Mundial y Foro Social Mundial, se aproximen y se integren recíprocamente con unos líderes que trabajen por vertebrar y conseguir que la sociedad responda a lo que realmente se espera de ella.

El mundo vive actualmente en una grave encrucijada y debe optar entre dos formas o modelos para afrontar los problemas y solucionarlos: el de la fuerza que hoy se ejerce desde un país, pero mañana puede hacerse desde otro, o a través de la coordinación o unificación de normas nacionales e internacionales con las cuales construir el nuevo edificio de la democracia y del estado de Derecho Internacional, fortaleciendo el derecho de éste en la seguridad, de que esta última es la mejor opción que atiende, protege y resuelve los problemas más graves que afectan a la humanidad.

Con toda modestia, pero también con toda la determinación del espíritu, propongo que hagamos ahora y aquí el compromiso de concebir y fabricar un arca de la memoria, capaz de sobrevivir el diluvio atómico. Una botella de náufragos siderales arrojados a los océanos del tiempo, para que la nueva humanidad de entonces sepa por nosotros lo que no han de contarles las cucarachas: que aquí existió la vida, que en ella prevaleció el sufrimiento y predominó la injusticia, pero también conocimos el amor y hasta fuimos capaces de imaginarnos la felicidad. Y que sepa y haga saber por todos los tiempos quiénes fueron los culpables de nuestro desastre, y cuán sordos se hicieron nuestros clamores de paz para que ésta fuera la mejor de las vidas posibles, y con qué inventos tan bárbaros y por qué intereses tan mezquinos la borraron del Universo.

 

Gabriel García Márquez

                  

Cuento de Navidad. Es posible un mundo diferente; Baltasar Garzón, Universidad Nacional de Quilmes / Prometeo, Buenos Aires, 2002.